Toda la vida de nuestro biografiado transcurrió en el pueblo de Arafo, donde se dedicó siempre al cuidado de sus propiedades agrícolas. Asimismo, estuvo vinculado a la Parroquia de San Juan Degollado, de la que fue notario público eclesiástico, así como bedel, mayordomo, hermano mayor y secretario de la Hermandad del Santísimo Sacramento. Además, tuvo un fuerte compromiso con la vida pública del municipio, en el que desempeñó numerosos cargos y empleos: regidor o concejal en varias etapas, teniente de alcalde, juez de paz accidental, depositario de fondos y síndico del Ayuntamiento, alcalde constitucional, secretario del Juzgado y del Ayuntamiento, encabezado de las fiestas patronales y elector contribuyente para diputados a Cortes.
Nació en Arafo el 22 de febrero de 1812, siendo hijo de don Antonio Amaro Díaz y doña Felipa (Rodríguez) Montano de Torres, naturales y vecinos de dicha localidad. Al día siguiente fue bautizado en la iglesia de San Juan Degollado por el cura párroco propio don Antonio Rodríguez Torres; se le puso por nombre “José Pedro” y actuó como padrino don Agustín Hernández. Curiosamente, durante la mayor parte de su vida fue conocido como “Pedro José” …
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