Arona: Don Arcadio Estrada y Sarabia (1826-1914), sargento 2º de Milicias condecorado, agricultor y emigrante a Puerto Rico, con numerosa y destacada sucesión en dicha isla

Este artículo está dedicado a un modesto personaje de Arona, nacido en una destacada familia de militares y políticos sureños, que también ingresó en el Batallón Ligero Provincial de Abona nº 3 de Canarias, en el que inició una breve carrera militar en la que fue ascendiendo desde soldado a cabo 2º, cabo 1º y sargento 2º de Milicias condecorado. Contrajo matrimonio en su pueblo natal con su prima hermana doña Ramona Espínola y Sarabia, miembro también de una familia vinculada a las Milicias Canarias, con quien emigró luego a Puerto Rico, acompañados de tres de sus hijos, donde se dedicaron a la agricultura, viviendo primero en el municipio de San Sebastián y luego en el de Lares. En dicha isla nació otro hijo y en ella dejaron amplia y destacada sucesión, que en parte pasó a Estados Unidos.

Nació en el pago de Las Casas de Arona el 12 de enero de 1826, siendo hijo del militar don Domingo Estrada de la Guerra y Sarabia y doña Juana Sarabia y González Bethencourt. Tres días después fue bautizado en la iglesia de San Antonio Abad por el cura párroco propio don Miguel Rodríguez Guillama; se le puso por nombre “Arcadio Benito del Sacramento” y actuó como padrino don Agustín Estrada…

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La parroquia de San José de Barranco Hondo (Candelaria) [1943-2022]

Como ya relatamos en un artículo anterior, a mediados del siglo XIX se despertó en los vecinos de Barranco Hondo el deseo de tener una ermita propia, con lo que se ahorrarían los traslados a otros templos alejados para asistir a misa, que solo se limitarían a la celebración de Sacramentos. Así, en 1849, cuando el pueblo contaba con 78 familias (unos 340 habitantes), elevaron un escrito al vicario capitular y gobernador eclesiástico de la Diócesis en sede vacante, para exponerle las graves dificultades que tenían para poder atender sus necesidades espirituales debido a la carencia de un templo, manifestándoles su deseo de construir una ermita bajo la advocación de San José, así como su intención de responsabilizarse de los gastos que aquella edificación generara. Tras obtener la preceptiva licencia, comenzó a construirse y se terminó en 1860; pero después de siete años de litigio, fue bendecida en 1867 y se abrió al culto. A finales de esa centuria, se estableció en ella la Hermandad del Santísimo Cristo de la Buena Muerte y la Cofradía de las Ánimas.

Transcurridas más de ocho décadas desde la construcción de la ermita, dado el incremento de población que había experimentado el pueblo de Barranco Hondo y el vecino de Igueste de Candelaria, con el fin de atender mejor a las necesidades espirituales de sus vecindarios, desde el Obispado de Tenerife se pensó en la necesidad de crear sendas parroquias en ambas localidades, tal como le comunicó el deán de Tenerife, don Domingo Pérez Cáceres, al párroco-arcipreste de Güímar, don Matías Batista Díaz, el 11 de mayo de 1943. Una vez cumplidos todos los trámites, y atendiendo al informe favorable del arcipreste, las ermitas de San José de Barranco Hondo y de la Santísima Trinidad de Igueste fueron elevadas a parroquias, segregadas de la de Santa Ana de Candelaria, en el arreglo parroquial efectuado el 15 de noviembre de dicho año 1943, por decreto dado en San Cristóbal de La Laguna por Fray Albino González Menéndez-Reigada, VII Obispo de Tenerife; y comenzaron a regir el 1 de enero de 1944.

Desde entonces, la iglesia parroquial de Barranco Hondo ha sido reformada en 1961 y 1966; se la ha dotado con casa y salón parroquial, nueva sacristía y torre con reloj; se han adquirido nuevas imágenes y se han restaurado las más antiguas; se han construido las capillas del Cristo de Limpias y San Antonio; y se han continuado celebrando sus fiestas. En los más de 78 años y medio de existencia de esta parroquia de San José, ha sido visitada por cinco obispos; y han estado al frente de ella un total de 20 sacerdotes, todos ellos dominicos y la mayoría párrocos también de Igueste de Candelaria (salvo Fr. Rafael Tejera y Fr. Antonio Quintanilla, que lo han sido en exclusiva de este pueblo), pero ninguno ha nacido en el término municipal de Candelaria. El récord de permanencia lo ostenta Fr. Ramón Fernández Álvarez (15 años), seguido por Fr. Francisco García Martín (11 años y medio, en dos etapas), Fr. Daniel López Mirón (casi 11 años, en dos etapas), Fr. Rafael Antonio Tejera Parrilla (casi 7 años) y Fr. José Polanco Estalayo (6 años y medio)…

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Güímar: Don Rigoberto Díaz Melero (1921-1984), alférez médico de complemento, médico titular y jefe local de Sanidad, académico correspondiente de la Real Academia de Medicina de Canarias y autor de la “Geografía médica del término municipal de Güímar”, reconocido con la Medalla de Plata de Güímar y la nominación de una calle

Le conocí desde mi nacimiento, pues fue siempre el médico de cabecera de mi familia, el que cuidó de la salud de todos y, aunque no tenga noción de ello, el que logró sacarme de la anemia que sufrí en mi niñez. Muchas veces estuve en su consulta a lo largo de 27 años y siempre me impresionó aquel hombre serio, pero de trato amable, que nos devolvía la tranquilidad con su siempre atinado diagnóstico y su eficaz tratamiento. Aunque mis visitas disminuyeron mucho en los últimos años, sufrí un enorme disgusto con su muerte, pues sentí que algo de mí, que una parte de mi vida, desaparecía con él.

Don Rigoberto, nacido en una pequeña villa de Cuenca, obtuvo el título de Licenciado en Medicina y prestó su servicio militar como alférez médico de complemento. Estuvo destinado en Tejina (La Laguna), de donde pasó a Güímar, donde ejerció el resto de su vida, desarrollando una intensa actividad profesional como médico titular y jefe local de Sanidad; también fue consejero local del Movimiento, vocal de la “U. D. Güímar” y socio fundador del Club de Leones. Ingresó como miembro correspondiente en la Real Academia de Medicina del Distrito, con un discurso sobre la “Geografía médica del término municipal de Güímar”, que se publicó casi tres décadas después de su muerte. Tras su fallecimiento, se reconoció su intensa labor profesional con la concesión de la Medalla de Plata de Güímar, se dio su nombre a la calle en la que vivía y tenía su consulta y se le tributó un merecido homenaje póstumo.

Nuestro biografiado nació en San Lorenzo de la Parrilla, en la provincia de Cuenca, el 9 de marzo de 1921, siendo hijo de don Herminio Díaz López, natural de Poveda de la Obispalía (Cuenca), y doña Vicenta Melero Montoro, que lo era de la citada villa de San Lorenzo de la Parrilla…

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Santiago del Teide-Guía de Isora: Don Evaristo Trancho Fernández (1866-1926), sargento de la Guardia Civil, auxiliar de la Recaudación de Hacienda de Guía de Isora y secretario del Ayuntamiento y del Juzgado municipal de la villa de Santiago del Teide

Este artículo está dedicado a un guardia civil peninsular que estuvo destinado en la Comandancia de Canarias como sargento de dicho cuerpo, empleo con el que luego fue destinado a la Comandancia de Ciudad Real, en la que obtuvo su retiro. Luego regresó a Tenerife, donde ejerció como auxiliar de la Recaudación de Hacienda en la zona de Guía de Isora, donde vivió varios años, en los que se comprometió con los intereses locales. Posteriormente fue nombrado secretario del Ayuntamiento constitucional y del Juzgado municipal de Santiago del Teide, empleos que desempeñó durante 12 años; y, como tal, fue cofundador y vocal de la Asociación de Secretarios de Ayuntamientos del Partido de Icod. También fue designado corresponsal en Santiago del Teide del nuevo Consejo Provincial de Agricultura y Ganadería de Canarias. Vivió y falleció en Tamaimo, donde celebró segundas nupcias el día anterior a su muerte.

Nació en Valladolid hacia 1866, siendo hijo de don Crisanto Trancho y doña Vicenta Fernández. Sabemos que contrajo un primer matrimonio antes de establecerse en Santiago del Teide, pero de momento no hemos podido localizar el nombre de su primera esposa, con quien tuvo sucesión, aunque sí el de la segunda…

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Granadilla de Abona: Don Antonio Rodríguez Venero (1799-1832), propietario agrícola y subteniente de Granaderos, fallecido en plena juventud

Siguiendo una larga tradición familiar, nuestro biografiado ingresó en las Milicias Canarias como subteniente de la compañía de Granaderos del Regimiento Provincial de Abona, pero en dicho empleo solo permaneció durante poco más de un año, debido a su prematuro fallecimiento, truncándose así la que pudo haber sido una destacada carrera militar. Simultáneamente, trabajó en el cuidado de las propiedades agrícolas de las que dependía la economía familiar. Permaneció soltero.

Nació en Granadilla de Abona el 9 de junio de 1799, siendo hijo de don Juan Rodríguez Bello y doña María Benero del Castillo [sic], naturales y vecinos de dicho lugar. Ese mismo día fue bautizado en la iglesia de San Antonio de Padua por el párroco don Cristóbal Pérez Barrios; se le puso por nombre “Antonio Pasqual Pedro” y actuó como madrina su tía doña Juana Rodríguez Bello, vecina del mismo lugar…

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Fasnia: Don Domingo (González) Chico (1769-1849), propietario agrícola y ganadero, comprometido con la creación de la parroquia de San Joaquín y la construcción de la nueva iglesia, apoderado, diputado de abastos, síndico personero y alcalde real del Ayuntamiento

Nuestro biografiado, propietario agrícola y ganadero, fue uno de los vecinos que promovieron el expediente para elevar a parroquia la antigua ermita de San Joaquín, contribuyendo también a la construcción de la nueva iglesia parroquial. Además, gracias al prestigio de que llegó a gozar entre sus paisanos, éstos lo eligieron para que desempeñase diversos cargos públicos en el nuevo Ayuntamiento de Fasnia, a lo largo de un cuarto de siglo: apoderado para el Cabildo abierto, regidor, síndico personero, alcalde real y diputado.

Nació en el pago de Fasnia el 18 de noviembre de 1769, siendo hijo de don Bartolomé (González) Chico y doña Bárbara González. El 13 de diciembre inmediato fue bautizado en la iglesia de San Juan Bautista de Arico por el sacerdote franciscano fray José Antonio Truxillo, con licencia del cura párroco don José Nicolás Valladares; se le puso por nombre “Domingo” y actuó como padrino don Juan Rodríguez, de la misma naturaleza y vecindad. A lo largo de su vida fue conocido con el apellido compuesto “González Chico” o, más frecuentemente, con el simple “Chico”, que fue el que continuó su descendencia. …

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Arico: Don José Nicolás Valladares (1721‑1780), sacerdote aficionado a la pintura y la escultura, párroco de La Guancha durante 6 años y cura propio de Arico durante 24, hasta su muerte

Nuestro biografiado fue uno de los numerosos sacerdotes orotavenses que ejercieron en las parroquias del Sur de Tenerife. Tras regentar la parroquia del Dulce Nombre de Jesús de La Guancha durante seis años, fue nombrado cura servidor de la de San Juan Bautista de Arico, que luego obtuvo en propiedad y a cuyo frente permaneció durante 24 años, hasta su muerte. Desarrolló una destacada labor en esta localidad, logrando concluir las obras del templo parroquial, que en su tiempo se dotó de imágenes y otros objetos de culto. Además, fue aficionado a la pintura y a la escultura, dejando pruebas de esta labor en esta parroquia.

Nació en la villa de La Orotava el 17 de abril de 1721, siendo hijo de don Francisco Agustín de Valladares y doña Francisca García Encinoso, naturales de dicha villa. Cinco días después fue bautizado en la iglesia de San Juan Bautista de El Farrobo por el beneficiado don Antonio Rodríguez Ximénez Pimienta; se le puso por nombre “José Nicolás Antonio” y actuó como padrino su pariente el presbítero don Nicolás Alfonso Valladares…

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Candelaria: Don Juan Domingo González Hernández (1829-1910), guardia municipal de Santa Cruz de Tenerife hasta su muerte, cuando ya contaba ¡80 años!, y primer policía local nacido en Candelaria

Nuestro biografiado nació en el seno de una familia muy modesta de Candelaria, estrechamente vinculada a la parroquia de Santa Ana, de la que tres de sus miembros fueron sacristanes y otro sochantre. Tras su matrimonio continuó viviendo en su pueblo natal, donde probablemente trabajó en la mar, como la mayoría de sus paisanos, prestando también el servicio militar en las Milicias Canarias. Tras su licenciamiento se estableció solo en Santa Cruz de Tenerife, donde en su madurez obtuvo una plaza de guardia municipal, a pesar de ser analfabeto. Cuando ya contaba 73 años y debía estar jubilado, se le confirmó como guardia municipal nocturno de dicha capital, con carácter interino, empleo en el que permaneció hasta su muerte, acaecida a los 80 años de edad, siendo por entonces, probablemente, el empleado más viejo del Ayuntamiento, por lo que debió tener muy buena salud y aparentar menor edad. Fue el primer policía local nacido en el municipio de Candelaria.

Nació en Candelaria el 20 de septiembre de 1829, siendo hijo de don Pedro de Jesús González Leal y doña María del Carmen Hernández Pérez. El 26 de ese mismo mes fue bautizado en la iglesia de Santa Ana por el cura párroco don Juan Núñez del Castillo; se le puso por nombre “Juan Domingo” y actuó como padrino don Pedro Pascasio Rodríguez, de dicha vecindad…

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Distinciones municipales concedidas por el Ayuntamiento de Vilaflor de Chasna durante la Dictadura franquista (1936-1975)

Aunque el Ayuntamiento de Vilaflor de Chasna nunca ha sido muy pródigo en la concesión de honores y distinciones, durante la Dictadura franquista se aprobaron muchas más que en toda la historia municipal anterior. A pesar de que tras el golpe de estado que inició la Guerra Civil se acordó mantener los nombres tradicionales de las calles y las plazas del municipio, en las décadas posteriores se concedieron por lo menos diez distinciones para siete personas y una imagen religiosa, siendo probable que aún falte alguna que por el momento no hayamos podido localizar.

En 1936 se nombró Hijo Adoptivo al general don Francisco Franco Bahamonde; en 1943 se concedió la misma distinción al secretario del Ayuntamiento don Manuel Fernández López; en 1947 también se nombró Hijo Adoptivo el nuevo obispo tinerfeño don Domingo Pérez Cáceres y se dio su nombre a la plaza principal de la localidad; pocos años después se nominó una calle con el nombre del ingeniero forestal don Francisco Ortuño Medina; en 1961 se nombró Hijo Predilecto al Hermano Pedro, cuyo nombre también se dio a una avenida; en ese mismo año se nombró Alcaldesa Perpetua a la Virgen de Abona, Patrona del Sur de Nivaria; y en 1962 se concedió el título de Cronista Oficial de Vilaflor, primero al abogado don Jesús Hernández Acosta y luego al maestro y poeta don Emeterio Gutiérrez Albelo, probablemente por renuncia del anterior…

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Güímar: Don Francisco de Laisequilla y Palacio (1732-1814), teniente de Milicias propuesto para capitán, socio de número de la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Las Palmas y diputado del común del Cabildo de Gran Canaria

Este desconocido güimarero nació en el seno de una ilustre familia de militares, castellanos, regidores perpetuos de la isla, etc., cuya nobleza fue amparada por el antiguo Cabildo de la isla. Ya con una edad avanzada decidió ingresar en las Milicias Canarias, en las que sirvió durante más de 20 años, primero como subteniente y luego como teniente del Regimiento Provincial de La Laguna; incluso en una ocasión fue propuesto en una terna para su ascenso a capitán, pero no alcanzó este empleo. Luego se avecindó en Las Palmas de Gran Canaria, para hacerse cargo de las cinco hermanas solteras que allí residían; en dicha isla ingresó en la Real Sociedad Económica de Amigos del País, fue diputado del común del Cabildo o Ayuntamiento y miembro de la Junta de Montes. Pero ante su ausencia, sin licencia militar, se declaró vacante en su Regimiento su plaza de teniente y se le concedió el retiro.

Nació en Güímar el 15 de marzo de 1732, siendo hijo del capitán don Francisco Nicolás de Laisequilla y Medina, natural de La Laguna, y doña Francisca Manuela Suárez y Estévez, que lo era de Adeje, y ambos vecinos de la primera localidad. El 24 de ese mismo mes fue bautizado en la iglesia de San Pedro Apóstol por el presbítero don Juan Alonso Ximénez, con licencia del beneficiado; se le puso por nombre “Francisco Raphael Juachin” y actuó como padrino el capitán don Rafael Juan de Castilla y Valdés, vecino de la ciudad de La Laguna…

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