Granadilla de Abona – Vilaflor de Chasna: Lcdo. don Antonio García del Castillo (1679-1760), sacristán mayor, sochantre, colector y teniente servidor de la parroquia de San Pedro Apóstol de Vilaflor

antonio-garcia-del-castillo     Nuestro biografiado fue uno de los muchos hijos de Granadilla de Abona que siguió la carrera eclesiástica. Tras su ordenación sacerdotal se estableció como capellán en Vilaflor de Chasna, adscrito a la parroquia de San Pedro Apóstol, en la que ejerció durante más de medio siglo como sacristán mayor, sochantre, colector y teniente servidor de dicho beneficio. Se le mencionaba con frecuencia como “Licenciado”, por lo que es probable que obtuviese dicho título en Sagrada Teología. Al final de su vida regresó a su pueblo natal, en el que falleció.

     Nació en Granadilla de Abona el sábado 25 de marzo de 1679, siendo hijo de don Juan González del Castillo y doña María Gómez, labradores, naturales y vecinos de dicho lugar. Cuatro días después fue bautizado en la iglesia parroquial de San Antonio de Padua por fray Felipe Gómez, predicador del convento franciscano de la localidad, con licencia del cura párroco don Salva­dor González; se le puso por nombre “Antonio” y actua­ron como padrinos el citado párroco y doña Inés Pérez, “moza” e hija de don Gaspar Pérez y doña Ana García (labra­dores y vecinos del mismo lugar)…

     En el siguiente enlace se puede descargar el artículo completo:

Artículo-ANTONIO GARCÍA DEL CASTILLO

Las escuelas unitarias de La Sabinita (Arico) y sus maestros (1932-1975)

La Sabinita-plaza     En este artículo vamos a recordar la existencia, durante más de cuatro décadas, de las escuelas unitarias del núcleo de La Sabinita, situado en las medianías del extenso municipio de Arico, a 500 m de altitud y por encima de La Degollada y Arico el Nuevo. La primera escuela se instaló en dicho barrio en 1912, por traslado de la existente en Arico el Nuevo, al con contar con local en este pago. Luego, a partir de 1929, los vecinos de La Sabinita solicitaron la creación oficial de una escuela mixta atendida por maestra, lo que se hizo realidad a finales de 1931, comenzando a funcionar a comienzos del año siguiente. Ésta se desdobló a finales de 1933, al crearse una escuela unitaria de niños y la mixta existente transformarse en unitaria de niñas, por lo que pasó a ser una agrupación escolar de dos unidades. Ambas se mantuvieron hasta 1975, en que fueron suprimidas e integradas en el Colegio Nacional “Nuestra Señora de la Luz” de La Degollada.

     En sus 43 años de existencia, estuvieron al frente de la escuela mixta y de ambas unitarias 14 maestras y 22 maestros, ostentando el récord de permanencia en la de niñas doña Teodora Brito Hernández, con 7 años y medio, y en la de niños don Manuel de la Torre Fernández, con 6 años y medio (en dos etapas); seguidos por doña María Dolores Beautell Díaz y don Rómulo López González, respectivamente…

     En el siguiente enlace se puede descargar el artículo completo:

Artículo-ESCUELAS UNITARIAS DE LA SABINITA

Güímar: Don Manuel Delgado Gómez (1798-1856), fraile lego dominico, músico, compositor, cantor del coro, sochantre y organista primero de la Catedral de La Laguna

Manuel Delgado Gómez     Hijo mayor de una destacada familia de religiosos, cantores y músicos, nuestro biografiado inició su vida como un humilde fraile lego en la Orden de Predicadores, para dedicarse después de su exclaustración a su gran vocación musical, llegando a ser cantor del coro, sochantre y organista primero de la Santa Iglesia Catedral de La Laguna, por lo que figuró entre los profesionales de la música más prestigiosos de la isla en su época. Gozó de una desahogada posición económica, pues llegó a tener cuatro criados a su servicio. Debido a su condición y ocupaciones fue exonerado del servicio en la Milicia Nacional de dicha ciudad, a cambio de satisfacer una aportación al fondo económico de la misma.

     Nació en el güimarero barrio de Los Majuelos el 28 de diciembre de 1798, siendo hijo de don Juan Delgado Fresneda y doña María Victoria Gómez Bello. El 30 de dicho mes fue bautizado en la iglesia de San Pedro Apóstol por el presbítero don José Bernardo Carrillo, con licencia del beneficiado don Florentín Núñez y Torres; se le puso por nombre “Manuel Domingo de los Inocentes” y actuó como padrino don Juan Bautista Delgado, natural del pago de Igueste en la jurisdicción de Candelaria…

     En el siguiente enlace se puede descargar el artículo completo:

Artículo-MANUEL DELGADO GÓMEZ

Arona: Don Domingo de Frías Bello (1772-1843), soldado prisionero en la guerra contra Francia, sargento 1º de Granaderos perpetuado y propuesto para oficial, regidor y alcalde real de Arona

Arona-41.5 (CFIT)-2     Don Domingo de Frías Bello, miembro de una destacada familia chasnera e hijo del alcalde de la jurisdicción, ingresó en las Milicias como simple soldado; participó en la Guerra contra Francia en Cataluña y Valencia, donde fue hecho prisionero, y una vez liberado prestó sus servicios en Santa Cruz de Tenerife; en reconocimiento a sus méritos ascendió luego a cabo 1º, sargento 2º y sargento 1º de Granaderos, concediéndosele la continuación en el servicio; aunque sin éxito, también fue propuesto para oficial, tanto para subteniente como para teniente del Regimiento Provincial de Abona; y obtuvo su retiro tras haber servido a las Milicias durante más de 22 años. Después de retirado desempeñó en el Ayuntamiento de Arona los cargos de regidor y alcalde real. Disfrutó de una desahogada situación económica, como propietario agrícola, y fue hermano del Santísimo Sacramento.

     Nació en el entonces pago de Arona el 4 de agosto de 1772, siendo hijo de don Juan de Frías Bello Mazuelos y Morales y doña Perseverancia (o Perseverenciana) Antonia Alfonso de Montesdeoca y Domínguez. Cinco días después recibió las aguas bautismales en la iglesia de San Pedro Apóstol de Vilaflor, a cuya jurisdicción pertenecía por entonces dicho lugar, de manos del beneficiado propio don Agustín Lorenzo Viera y Torres; se le puso por nombre “Domingo Antonio de San Justo” y actuaron como padrinos don Manuel de León y doña Bárbara de Frías, vecinos de La Escalona…

     En el siguiente enlace se puede descargar el artículo completo:

Artículo-DOMINGO DE FRÍAS BELLO

La ayuda de parroquia de Candelaria (1643-1795). Dependiente de Güímar pero con jurisdicción sobre Arafo

Candelaria-ayuda parroquia     En un artículo anterior ya nos ocupamos de los orígenes parroquiales del Valle de Güímar, con la creación en 1533 del “Medio Beneficio Curado Perpetuo de Güímar”, la primera parroquia de la comarca, que a pesar de llevar ese nombre tuvo su primera sede en Candelaria, que por entonces era el pueblo más importante del Valle. Comenzó a regir en 1539, estableciéndose inicialmente en el santuario de la Virgen, lo que dio lugar a enfrentamientos entre el clero secular y el regular, pues desde hacía nueve años los dominicos estaban a cargo del cuidado de la Virgen. Tras firmar un convenio con éstos, la parroquia pasó en 1543 a la cueva de San Blas, donde permaneció hasta 1580, en que se abrió al culto la iglesia de Santa Ana, construida ex profeso para albergar el beneficio comarcal. En este templo continuó hasta 1630, en que tras haber permanecido durante casi un siglo en Candelaria se trasladó a la iglesia de San Pedro Apóstol de Güímar, donde ya se concentraba la población más numerosa y el mayor potencial económico de la comarca, por lo cual también se llevó la alcaldía pedánea y la capital de las Milicias de la amplia jurisdicción, que abarcaba los actuales municipios de Candelaria, Arafo, Güímar y Fasnia.

     Pero la oposición de los vecinos de Candelaria, apoyados por los de Arafo, a perder la parroquia que habían atendido con cariño y esmero durante un siglo, junto con su resistencia a acudir a la iglesia de San Pedro, motivó un largo pleito, que se vino a resolver en 1643, al crearse una ayuda de parroquia en la iglesia de Santa Ana, dependiente de la de Güímar pero con jurisdicción sobre Arafo, en la que además de celebrar misa se podían administrar los distintos Sacramentos, pues estaba atendida por un teniente de párroco (del clero regular o secular), mantenido con primicias o emolumentos, aunque el beneficiado de San Pedro acudía a celebrar misa los días de fiesta, como prerrogativa de la matriz. Dicha ayuda parroquial se mantuvo durante más de un siglo y medio, hasta su transformación en una parroquia totalmente independiente en 1795, que luego también ha sido matriz, pues en el siglo XX sufrió numerosas segregaciones…

     En el siguiente enlace se puede descargar el artículo completo:

Adeje: Don Gaspar Antonio de Torres y Casañas (1750-1833), sacerdote, paje y capellán de los Condes de La Gomera y Marqueses de Adeje

Gaspar Antonio de Torres     Nacido en el seno de una familia fuertemente ligada a la Casa Fuerte de Adeje, don Gaspar Antonio de Torres ingresó como paje de los Condes de La Gomera y Marqueses de Adeje. Luego, obtuvo las capellanías que habían creado estos señores y, gracias a ellas, pudo ordenarse de sacerdote. Tras su ordenación, ejerció durante toda su vida como su capellán de dichos nobles, tanto en el oratorio de dicha Casa Fuerte como en el de la hacienda de El Durazno (La Orotava), donde vivió la mayor parte de su vida. Testó, falleció y fue sepultado en el Puerto de La Cruz.

     Nació en el pago de Tijoco (Adeje) el 6 de enero de 1750, siendo hijo de don Pedro de Torres Martel y Acevedo y doña Paula Casañas García, avecindados en dicho pago. El 14 de ese mismo mes fue bautizado en la iglesia parroquial de la Villa de Adeje por el beneficiado don Gaspar Gabriel Estévez Gorvalán; se le puso por nombre “Gaspar Antonio” y actuaron como padrinos don Francisco Casañas y doña María Delgado…

     En el siguiente enlace se puede descargar el artículo completo:

Artículo-GASPAR ANTONIO DE TORRES

Güímar: Don Urbano Cubas Hernández (1917-1947), sargento profesional de Artillería, fallecido accidentalmente en plena juventud

Urbano Cubas Hernández     Miembro de una familia numerosa, muy apreciada en El Escobonal, don Urbano se dedicó inicialmente a la agricultura, hasta que ingresó como voluntario en el Ejército, cuando contaba tan solo 18 años de edad. Siendo artillero 2º le sorprendió el inicio de la Guerra Civil, durante la cual ascendió a cabo y se le habilitó para sargento de Artillería, prestando sus servicios en diferentes frentes. Una vez finalizada la contienda, como reconocimiento a sus méritos se le concedieron dos condecoraciones y se le ascendió a sargento provisional. Luego, tras superar el correspondiente curso de transformación, ascendió a sargento profesional de Artillería. Como tal estuvo destinado en La Palma, donde contrajo matrimonio, y luego en Santa Cruz de Tenerife, hasta que un desgraciado accidente truncó su vida en plena juventud.

     Nuestro biografiado nació en El Escobonal (Güímar) el 18 de septiembre de 1917, a las cuatro de la madrugada, siendo hijo de don Indalecio Cubas Castro y doña Leocadia Hernández Díaz. El 21 de octubre inmediato fue bautizado en la iglesia de San Pedro Apóstol de Güímar por el cura regente don Simón Higuera y Marrero; se le puso por nombre “Urbano” y actuó como padrino su tío paterno don Evaristo Cubas Castro, de la misma naturaleza y vecindad…

     En el siguiente enlace se puede descargar el artículo completo:

Artículo-URBANO CUBAS HERNÁNDEZ

El artículo “Ciudades de Tenerife / Granadilla / Por qué escribo estas cuartillas” (1934), de doña María de las Casas Pérez

Granadilla-1934     Este artículo, dedicado a Granadilla de Abona y firmado por doña María de las Casas Pérez, fue publicado en las páginas 252 y 253 del Almanaque anual del diario Hoy, de Santa Cruz de Tenerife, el 1 de enero de 1934. En el pequeño trabajo, la autora comienza aclarando que escribía el artículo por encargo de don Manuel Batista y por su amor a dicha localidad. Luego hace una fugaz descripción del término, para destacar el protagonismo que éste debería tener en el futuro desde los puntos de vista agrícola, comercial y cultural, dada la mejora de las comunicaciones, su estratégica ubicación entre El Médano y Vilaflor, y el ser cabeza del partido judicial. Continúa haciendo un repaso a la problemática económi­ca y social de Granadi­lla, analizando sus necesidades en carrete­ras, agua, cultura, benefi­cencia y porvenir turístico, con lo que demuestra el profundo conocimiento que tenía de la situación real de su entorno.

     Considera como el principal problema del municipio la falta de agua para la agricultura y, ante la dificultad de explotación de las galerías, sugiere que la solución pasaría por la construcción de embalses, con la participación de accionistas. Con respecto a la educación, tema que le tocaba más de cerca, solicitaba la creación de una escuela graduada en la cabecera municipal y que el Ayuntamiento becase a los alumnos pobres en el Instituto de Segunda Enseñanza de la capital, pues eran muy pocos los granadilleros que alcanzaban títulos académicos. Se centra luego en la sanidad, solicitando a la corporación municipal que apoyase el sostenimiento de la clínica del médico don Antonio Pérez Díaz y, a través de la beneficencia, permitiese que los cuidados alcanzasen también a los vecinos más desfavorecidos del término. Finalmente, destaca la belleza de El Médano y la calidad de su playa, que considera la mejor de la isla, solo afectada por el viento constante. A continuación, en un párrafo que parece incompleto, también sugiere la plantación de árboles y el control de la cabra, como animal dañino para los montes.

     Su autora fue doña María de las Casas Pérez (1891-1969),  nacida en Santa Cruz de La Palma y fallecida en Los Llanos de Aridane, fue Bachiller, maestra, jefa de Telégrafos, escritora, conferenciante y profesora de Bachillerato…

     En el siguiente enlace se puede descargar el artículo completo:

Descripción-GRANADILLA DE ABONA-1934

Fasnia: Don José Esquivel Marrero (1923-1986), alférez de complemento de la I.P.S. y maestro nacional, que da nombre al colegio de Puerto Santiago, del que fue profesor en propiedad y director

José Esquivel Marrero     Nuestro biografiado cursó la carrera de Magisterio, al tiempo que prestó su servicio militar como alférez de complemento de la I.P.S. Ejerció inicialmente en las Escuelas Pías de Santa Cruz de Tenerife, durante muchos años. Luego, al igual que su hermano don Jorge Esquivel Marrero, desarrolló una intensa actividad docente durante 17 años en colegios públicos de distintas localidades del Norte y Sur de la isla: El Roque (San Miguel de Abona), Adeje, Santa Úrsula, Ravelo (El Sauzal), Taco (en tres ocasiones), Tamaimo y Puerto Santiago. En el colegio de esta última localidad, su destino definitivo, ejerció durante cinco años y asumió la dirección durante un corto período, hasta su prematura muerte; tras ésta se le dio su nombre a dicho centro, en reconocimiento a su brillante labor docente.

     Nació en Fasnia el 30 de abril de 1923, a las once de la mañana, siendo hijo de don Jorge Esquivel Díaz y doña Vicenta Marrero Expósito. El 11 de noviembre de ese mismo año fue bautizado en la iglesia parroquial de San Joaquín por el cura párroco propio don Luis Navarro Nóbrega; se le puso por nombre “José” y actuó como padrino don José Parejo Pérez, “Sobrestante de Obras Públicas” de Santa Cruz de Tenerife…

     En el siguiente enlace se puede descargar el artículo completo:

Artículo-JOSÉ ESQUIVEL MARRERO

Arafo: Don Tiburcio Pérez Hernández (1818-1900), sargento 2º de Milicias, cartero, miembro de la Junta Local de Instrucción Pública, fiscal municipal y primer teniente de alcalde

Tiburcio Pérez Hernández     Miembro de una ilustre familia, don Tiburcio Pérez siguió una modesta carrera militar, en la que ascendió desde soldado hasta sargento 2º de Milicias, habiendo estado destinado en el Regimiento Provincial de Güímar, en el Batallón Ligero Provincial de La Laguna y en la guarnición de Santa Cruz de Tenerife. Además, en su pueblo natal fue propietario agrícola, cartero, miembro de la Junta Local de Instrucción Pública, fiscal municipal, primer teniente de alcalde y elector contribuyente.

     Nació en Arafo el 22 de marzo de 1818, siendo hijo de don Juan Antonio Pérez Montano y Martín y doña Tomasa Hernández Rodríguez, naturales y vecinos de Arafo, aunque ella era oriunda de Güímar por su madre. Al día siguiente fue bautizado en la iglesia de San Pedro Apóstol de Güímar por el presbítero don José Bernardo Carrillo, teniente del beneficiado don Florentín Núñez y Torres; se le puso por nombre “Tiburcio de Jesús” y actuó como padrino el presbítero don Nicolás Rodríguez Torres, su tío abuelo materno. Vivió siempre en Arafo…

     En el siguiente enlace se puede descargar el artículo completo:

Artículo-TIBURCIO PÉREZ HERNÁNDEZ