Candelaria: Don Juan Pérez Castellano (1915-1988), sargento provisional de Infantería, guardia civil, tallador de quintos, gerente del Consorcio de Comerciantes, presidente y secretario del Casino y cartero de Candelaria

Juan Pérez Castellano    Nuestro biografiado desarrolló una corta carrera militar, al ser movilizado con motivo de la Guerra Civil. Entró en ella como soldado de 2ª de Infantería, empleo con el que fue herido de cierta gravedad en el frente de Madrid. Luego ascendió a sargento provisional, tras superar el correspondiente curso en la Academia de Jerez de la Frontera, siendo destinado a Granada. Después de finalizada la contienda bélica solicitó su pase a la Guardia Civil, a la Comandancia de Tarragona, pero solo permaneció en este instituto durante 26 días, pues renunció ante el escasísimo sueldo que se le asignó, por lo que fue licenciado como sargento de complemento de Infantería. Tras regresar a Candelaria, fue designado tallador de quintos en el Ayuntamiento, responsabilidad que mantuvo durante una docena de años. También fue gerente del Consorcio de Comerciantes de Candelaria y durante 13 años desempeñó diversos cargos directivos en el Casino de dicha localidad: vicesecretario, presidente, vicepresidente, vocal y secretario; además, en los últimos años de su vida fue socio de la Banda de Música “Las Candelas”. Pero, sobre todo, se le recuerda como funcionario de Correos en su villa natal, empleo que desempeñó durante 25 años, primero como cartero en solitario y luego, tras contar con un auxiliar, como jefe de la Oficina Auxiliar. Cuando ya habían pasado 21 años desde su muerte, el Ayuntamiento dio su nombre a la pequeña calle en la que vivió.

     Nació en Candelaria el 3 de octubre de 1915, siendo el hijo menor de don Antonio Pérez Castro y doña Peregrina Castellano Núñez. El 7 de noviembre inmediato fue bautizado en la iglesia de Santa Ana por el cura ecónomo don José Trujillo y Trujillo; se le puso por nombre “Juan Dionisio” y actuó como padrino don Domingo Rodríguez Sabina, natural y vecino del mismo pueblo. En noviembre de 1919 fue confirmado en el mismo templo…

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Artículo-JUAN PÉREZ CASTELLANO

El artículo “Reportajes de la isla. El Porís de Abona” (1931), de Atilano Santos (Antonio Suárez Amaro).

Arico-Punta de Abona     Este artículo, publicado en La Prensa el 14 de octubre de 1931 y firmado por “Atilano Santos”, constituye una de las primeras descripciones detalladas que conocemos de este núcleo de población del municipio de Arico. En él, su autor comienza por ubicar y describir de forma literaria este pequeño caserío litoral, destacando su encanto estético y su carácter acogedor. Luego se centra en los veraneantes santacruceros, que ya se disponían a abandonar su refugio vacacional, sorprendiéndole sobre todo las jóvenes, desinhibidas y encantadoras, que transmitían su alegría y con ella rompían el sosiego del lugar. Destaca el principal acontecimiento vivido durante su estancia, que todo el pueblo esperaba, la actuación de un artista con su perro amaestrado en la fonda de doña Juana y el posterior baile, que constituía la principal distracción de esa época.

     A continuación se ocupa de los dos principales medios de vida del lugar, favorecidos por la nueva carretera de Arico a El Porís, que había incrementado el tráfico agrícola y comercial entre los pueblos de la comarca y Santa Cruz de Tenerife: por un lado un buen servicio de barcos de cabotaje a motor, integrados en una empresa de gestión comunitaria; y por otro la pesca, en la que destacaba la calidad y el módico precio del pescado. Pero lamenta con firmeza la falta de una escuela de niños, a pesar de que el pueblo contase con un elevado censo escolar, pues los alumnos debían acudir diariamente a la escuela de Arico, a siete kilómetros de distancia. Concluye su reportaje haciendo un elogio del lugar, por su tranquilidad, la laboriosidad de sus vecinos, las virtudes de sus mujeres y el amor por la enseñanza, así como por el espíritu acogedor y la nobleza de sus habitantes, que, gracias a su fortaleza, soportaban la dureza de su vida y el desamparo en el que estaban sumidos.

     Su autor fue Antonio Suárez Amaro “Atilano Santos” (1892-1947), prestigioso periodista y escritor tinerfeño, con un fuerte compromiso social y político…

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Artículo-DESCRIPCIÓN PORÍS DE ABONA-1931

Güímar: Don Diego López Fresneda (1875-1945), secretario del Juzgado Municipal y de la Junta Regional de Secretarios Judiciales, procurador, directivo de casinos, corresponsal de La Región, presidente fundador de la Agrupación Socialista de Güímar y vicepresidente de la Federación Obrera Comarcal

Diego López Fresneda     Después de permanecer dos años en Cuba, obtuvo, previo examen en la Audiencia Territorial de Canarias la plaza de secretario del Juzgado Municipal de Güímar, como tal, también asumió el cargo de secretario de la Junta Municipal del Censo Electoral; luego obtuvo, tras otro examen, el título de procurador para ejercer en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Santa Cruz de Tenerife; también fue elegido secretario de la Junta Regional de Secretarios Judiciales. Además, ejerció como agente de seguros y corresponsal del periódico La Región. Simultáneamente, tuvo una intensa actividad social y política, pues fue contador del Casino de Güímar, secretario fundador y vocal del Casino “La Unión”, somatenista, monologuista, presidente fundador de la Agrupación Socialista Tinerfeña de Güímar, vicepresidente de la Federación Obrera Comarcal, presidente de varias comunidades de aguas y delegado comarcal de la Federación Canaria de Luchas.

     Nació en la calle de San Pedro Abajo de Güímar el 30 de septiembre de 1875, a las tres de la madrugada, siendo hijo de doña Clotilde López Fresneda y Olivera. El 3 de octubre fue bautizado por el presbítero don Pedro Pérez Fariña con licencia de don Fidel Farré Pujol, cura párroco ecónomo y arcipreste del partido; se le puso por nombre “Diego Miguel Francisco del Sacramento” y actuó como padrino don Diego Alfambra y Rodríguez, natural de Conchar (Granada), siendo testigos don Emilio Hernández Delgado y don Juan Castellano González…

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Artículo-DIEGO LÓPEZ FRESNEDA

Arafo: Don Imeldo Ferrera Reyes (1922-1996), sargento 1º músico, subdirector de la Banda “Nivaria”, fundador de la Coral “María Auxiliadora”, director y fundador de varias agrupaciones musicales en la Península y Tenerife, que da nombre a una calle de Tarifa

Imeldo Ferrera Reyes     Uno de los músicos araferos más fecundos, tanto como intérprete, director y fundador, de diversas agrupaciones musicales de la Península y Canarias, ha sido sin duda don Imeldo Ferrera Reyes. Comenzó siendo instrumentista de las bandas “La Candelaria” y “Nivaria”, labor que compaginó con la de auxiliar mecanógrafo del Ayuntamiento de Arafo. Luego inició su carrera en la música militar como educando voluntario, en la que fue ascendiendo a cabo músico, sargento músico y sargento 1º con sueldo de brigada. Simultáneamente fue refuerzo y subdirector accidental de la Sociedad Filarmónica “Nivaria” de Arafo, miembro del Coro del Hospital Militar de Santa Cruz de Tenerife y miembro fundador de la Coral “María Auxiliadora” de la misma villa. Destinado como músico militar en la Península, fue por entonces director y fundador de la Banda de Música del Hospicio de Huesca; director-fundador de la Rondalla infantil del Frente de Juventudes, la Banda Municipal infantil y el Coro de la Sección Femenina de Tarifa (Cádiz); y director-fundador de la Banda de Música de Algeciras. De regreso a Tenerife, fue director de la Banda de Música de Guía de Isora, de la Banda de Cornetas y Tambores de la Agrupación Juvenil “San Jerónimo” de Taco (La Laguna) y de la Banda de Música “San Sebastián” de Tejina (La Laguna), así como director-fundador de las Rondallas de La Esperanza (El Rosario) y San Lázaro (La Laguna). Como reconocimiento a sus méritos musicales, tras su muerte, se le dio su nombre a una calle y una asociación musical de Tarifa (Cádiz).

     Nació en Arafo el 11 de octubre de 1922, a las dos de la madrugada, siendo hijo del prestigioso músico don Segundo Ferrera Gil y doña María Reyes Albertos. El 23 de ese mismo mes fue bautizado en la iglesia de San Juan Degollado por el cura párroco don Hildebrando Reboso Ayala; se le puso por nombre “Imeldo Serafín” y actuó como padrino el también músico don José Pestano Núñez, por entonces soltero…

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Artículo-IMELDO FERRERA REYES

La jurisdicción de Candelaria según el padrón vecinal de 1779, que incluía al actual municipio de Arafo

Candelaria-Arafo-1779    Desde el siglo XVI hasta el XVIII, la mayor parte del Sureste de Tenerife formaba una única entidad religiosa, militar y política, que incluía a los actuales municipios de Candelaria, Arafo, Güímar y Fasnia. En 1723 se redujo, al segregarse Fasnia para unirse a Arico. Luego, hacia 1770, Candelaria y Arafo se segregaron de Güímar, integrándose bajo una misma Alcaldía. Finalmente, en 1798 se segregó Arafo, quedando el término de Candelaria reducido a sus límites actuales. Por ello, según el “Padron general del vecindario del Lugar de Candelaria, con especificación de sexos, estado y ocupaciones, oficios y ejercicios conforme a Rs. Ordenes, año de 1779”, que se conserva en el archivo de la Real Sociedad Económica de Amigos del País de La Laguna, fechado el 28 de septiembre de 1779 y firmado por don Bernardo Marrero, alcalde real y notario público eclesiástico de Candelaria: “La juridicion deste Lugr. tendra dos Leguas y media de territorio, por el naciente confina con la mar, por el poniente con la cunbre, por el Norte con la juridicion de la ciudad de la Laguna, y por el Sul, con la juridicion de Guimar”. Por lo tanto, como se aprecia en sus límites, incluía a los actuales términos municipales de Candelaria y Arafo. La población total de la amplio jurisdicción ascendía por entonces a 1.451 habitantes, agrupados en 389 vecinos o familias, que se repartían en siete núcleos de población, que de mayor a menor eran los siguientes: Arafo (136 familias), Candelaria (91 familias), Igueste (73 familias), Barranco Hondo (44 familias), Araya (24 familias), Cuevecitas (14 familias) y Malpaís (5 familias).

    Los hombres de la cabecera municipal se dedicaban, sobre todo, a las actividades relacionadas con el mar, mientras que los del resto de núcleos de población se ocupaban, mayoritariamente, en las labores agrícolas y ganaderas. Por su parte, las mujeres, además de atender las labores de la casa y cuidar de la educación de sus hijos, se dedicaban a la alfarería en Candelaria, aunque también hilaban, y a la artesanía textil (hilar, tejer y coser) en los demás núcleos de medianías. En cuanto a la situación económica, solo una familia vivía bien, a dos les iba razonablemente, a 115 regular y a 5 medio regular, la mayoría de las restantes vivía pobremente. Con respecto a la instrucción, solo 35 personas sabían leer y escribir (30 hombres y 5 mujeres) y 13 tan solo leer (4 hombres y 9 mujeres); además, en todo el término solo existe constancia de que un hombre supiese contar, 5 niños estudiaban y otros 24 acudían a la escuela de Candelaria…

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Granadilla de Abona: Don Santiago González Rosa (1880-1918), sacerdote adscrito a las parroquias de Santa Cruz de Tenerife, con una labor pastoral truncada en sus inicios

Santiago González Rosa     Nuestro biografiado ingresó como alumno interno en el Seminario Diocesano de Tenerife, en el que cursó toda la carrera eclesiástica. Pero, tras su ordenación sacerdotal, poco pudo hacer en sus nueve años de labor pastoral, pues su salud se encontraba resentida y con tan solo 35 años ya padecía una incapacidad física permanente. Casi todo el tiempo estuvo adscrito a las parroquias de Santa Cruz de Tenerife, donde colaboró mientras pudo en las celebraciones litúrgicas; durante unos meses también fue coadjutor de la parroquia de Ntra. Sra. de la Concepción de la Villa de La Orotava.

     Nació en Granadilla de Abona el 17 de mayo de 1880, a las seis de la mañana, siendo hijo de don Abelino González Rodríguez y doña Cristina de la Rosa Cruz, naturales y vecinos de dicha localidad en el pago de Vicácaro. El viernes 21 de ese mismo mes recibió las aguas bautismales en la iglesia parroquial de San Antonio de Padua, de manos del párroco propio don Atanasio Viña y Vera; se le puso por nombre “Santiago” y actuó como padrino don Antonio García…

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Artículo-SANTIAGO GONZÁLEZ ROSA

Arona-Vilaflor de Chasna: Don José Domínguez Fraga Villarreal (1682-1764), teniente capitán de Milicias y comandante jefe interino de la compañía de Arona

José Domínguez Fraga     Nuestro biografiado vino al mundo en el seno de una ilustre familia de militares de Arona, descendiente del fundador y primer capitán de dicho pueblo, don Antón Domínguez; también fue ascendiente suyo don Gonzalo González Zarco, fundador de Granadilla de Abona y de la primitiva ermita de San Antonio de Padua. Siguiendo la tradición de sus mayores, ingresó como alférez en la compañía de Milicias de Arona del Regimiento de Abona, en la que luego ascendió a teniente capitán y llegó a actuar como comandante jefe interino de la misma. Contrajo matrimonio en el pago de Ifonche, donde se estableció inicialmente, y luego se afincó con su familia en el inmediato pago de La Escalona, en el que falleció.

     Nació en el entonces pago de Arona el 31 de mayo de 1682, siendo hijo de don Mateo Domínguez Fraga y doña Inés García de Fuentes. El 14 de junio de 1682 fue bautizado en la iglesia parroquial de San Pedro Apóstol de Vilaflor, de cuya jurisdicción dependía por entonces dicho lugar, por el beneficiado don Matías Ruiz Alfonso; se le puso por nombre “José” y actuaron como padrinos el luego alférez don Lázaro Domínguez (primo de su padre) y su esposa doña Ana Francisca, vecinos de dicho término…

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Artículo-JOSÉ DOMÍNGUEZ FRAGA VILLARREAL

Relación de alcaldes del municipio de Güímar a lo largo de su historia

No conocemos todos los alcaldes que ha tenido la jurisdicción de Güímar, pues sólo se conservan las actas del Ayuntamiento desde 1838 hasta el presente, con pequeñas lagunas, por lo que es exclusivamente en esta etapa cuando disponemos de las fechas exactas de posesión y cese. Sin embargo, gracias a documentos consultados en otros archivos locales, insulares y regionales, tanto públicos como privados, hemos podido elaborar una lista bastante extensa de las personas que con anterioridad a dicha fecha ocuparon tanto la Alcaldía Real en el Antiguo Régimen, desde el siglo XVI al XIX, como la Alcaldía Constitucional desde las primeras décadas de esa última centuria. La jurisdicción de estos alcaldes ha variado a lo largo del tiempo, pues en un principio abarcaba a la comarca sureste, que incluía a los actuales municipios de Candelaria, Arafo, Güímar y Fasnia. En 1723 se redujo, al segregarse Fasnia (que inicialmente se unió a Arico), y de nuevo volvió a hacerlo hacia 1770, en que se separaron Candelaria y Arafo, quedando el término reducido a sus límites actuales.

Como curiosidad, desde que el municipio se redujo a los límites municipales conocemos unos 90 alcaldes, pues muchos repitieron en el cargo. De ellos, el récord de permanencia en la Alcaldía lo ostenta don Pedro Guerra Cabrera, con 13 años y medio en dos etapas, seguido por don José Domingo Delgado Trinidad y Lugo, con 12 años, nada menos que en seis legislaturas diferentes, y don Antonio Gómez Ramos, también con 12 años, pero en una sola etapa. Tras ellos se sitúan: don José Mesa Pérez (casi 10 años consecutivos), don Julián Zafra Moreno (9 años, en una única etapa), don Gumersindo Rigoberto González González (7 años y medio, en dos etapas), don Hipólito de Castro Díaz (7 años, en dos etapas), doña Vicenta Díaz Sáez (7 años, en dos etapas), don Ignacio González García (6 años y medio, en dos etapas), don Víctor Ángel Pérez Rodríguez (más de 6 años), don Bernardo Rodríguez Torres (6 años, en tres etapas), doña Carmen Luisa Castro Dorta (6 años), don Tomás Cruz García (casi 6 años),  don Rafael Yanes Mesa (casi 6 años) y don Francisco Gutiérrez Ávila (5 años y medio, en dos etapas).

Con respecto al lugar de nacimiento, si nos limitamos al período en el que la Alcaldía sólo ha abarcado al actual municipio de Güímar, desde el último tercio del siglo XVIII hasta el presente, conocemos a 13 alcaldes que no han nacido en este municipio: don Simón García de Sejas (de El Hierro), don Francisco Hernández Marrero (de Arafo), don Antonio Luis Hernández (de Arico), don Fermín Rivero (de Vilaflor), don Francisco Gutiérrez Ávila (de Santa Cruz de Tenerife), don Francisco Plaza y Subirá (de Málaga), don Francisco Almeida Medina (de Arafo), don Antonio Ávila Castillo (de El Sauzal), don Lorenzo Castro Delgado (de Santa Cruz de Tenerife, aunque oriundo por sus padres de El Escobonal), don Juan Chávez Cejas (también de Santa Cruz de Tenerife), don Óscar Pérez Rosa (de La Habana, aunque oriundo de Güímar por sus padres), don Julián Zafra Moreno (de Santa Cruz de Tenerife) y doña Vicenta Díaz Sáez (de Tejina, en La Laguna). Esta última es, a su vez, la primera mujer que ha ostentado la Alcaldía, siendo la segunda doña Carmen Luisa Castro Dorta, primera persona de todas las que han ostentado la alcaldía que ha nacido en la comarca de Agache, lo mismo que su sucesor, don Airam Puerta Pérez…

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Candelaria: Don Agustín Pérez y Hernández (1800-1872), maestro de estudiantes y lector dominico, beneficiado propio y arcipreste de Santa Cruz de Tenerife, director de los Establecimientos Provinciales de Beneficencia y Cruz de la Orden civil de Beneficencia

Agustín Pérez Hernández-1     Nuestro biografiado profesó como fraile dominico en el Convento Real de su municipio natal y luego fue maestro de estudiantes, lector (profesor) de Artes y de Prima, misionero del Santísimo Rosario del Convento y Colegio de La Laguna, así como prosecretario del prior provincial; por entonces fue admitido como socio de la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Tenerife. Una vez secularizado con motivo de las leyes desamortizadoras, se estableció en Santa Cruz de Tenerife, donde fue nombrado sucesivamente: beneficiado servidor de la iglesia auxiliar de El Pilar, beneficiado interino de Ntra. Sra. de la Concepción, director de los Establecimientos Provinciales de Beneficencia y arcipreste de ausencias de Santa Cruz. Luego, tras superar la correspondiente oposición, fue nombrado beneficiado rector propio de Ntra. Sra. de la Concepción y arcipreste en propiedad del distrito capitalino; también fue mayordomo de las imágenes de Ntra. Sra. de la Concepción y del Carmen, así como hermano mayor de la Hermandad de la Inmaculada Concepción y el Carmen. En reconocimiento a los méritos contraídos durante la gravísima epidemia de fiebre amarilla que azotó a la capital del archipiélago, se le concedió la Cruz de 2ª clase de la Orden Civil de Beneficencia; además, fue socio de la Sociedad Económica de Amigos del País de Santa Cruz de Tenerife. Tras su muerte, por suscripción popular se levantó un mausoleo en el cementerio capitalino, que aún existe, y se colocó un retrato suyo al óleo en la sacristía de la referida iglesia de la Concepción.

     Nació en el pago de Las Cuevecitas de Candelaria (por entonces conocido como “La Cuevesita”) el 18 de enero de 1800, siendo hijo de don Juan Francisco Pérez de Vera, natural del pago de San Isidro (El Chorrillo), por entonces en la jurisdicción de Geneto (La Laguna), y de doña Josefa de la Cruz Hernández Truxillo, que lo era del pago de Araya. Cinco días después recibió el bautismo en la iglesia parroquial de Santa Ana, de manos del cura párroco don Agustín Tomás de Torres; se le puso por nombre “Agustín Francisco” y actuó como padrino don Miguel Francisco Chico, vecino de Araya…

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Artículo-AGUSTÍN PÉREZ HERNÁNDEZ

Adeje: Don Jorge Zaragoza Bethencourt (1888-1930), sargento de Artillería, presidente del Comité Republicano, corresponsal de El Progreso, agente-liquidador de arbitrios y concejal del Ayuntamiento

Jorge Zaragoza     Nuestro biografiado siguió una corta carrera militar, en la que alcanzó el empleo de sargento de Artillería en la reserva y, como tal, fue tallador de quintos en el Ayuntamiento de Adeje. En la actividad política destacó como presidente del Comité local Republicano, corresponsal del diario republicano autonomista El Progreso y concejal del Ayuntamiento. Además, estuvo empleado como agente-liquidador de arbitrios del Cabildo en El Puertito de Adeje, ejerció como vocal de la Junta Local de Primera Enseñanza y fue miembro del Somatén Armado de dicha villa. Cuando su vida prometía alcanzar nuevas responsabilidades y unas cotas mayores de prestigio, fue truncada por una muerte prematura.

     Nació en Adeje el 21 de enero de 1888, siendo hijo de don don Félix Zaragoza y Torcellado, natural de la villa de Infiesto en el municipio de Piloña (Asturias) y de oficio “del campo”, y de doña Ángela Bethencourt Melo, que lo era de Arona. El 4 de marzo fue bautizado en la iglesia de Santa Úrsula por el cura párroco ecónomo don Juan García Alfonso; se le puso por nombre “Jorge Fructuoso Eduardo” y actuó como madrina doña María Luisa González Feo, siendo testigos don Pedro Euriel Casimiro y don José García Díaz…

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Artículo-JORGE ZARAGOZA BETHENCOURT