Los graves efectos del aluvión de 1826 en el municipio de Güímar y en los pueblos vecinos de Arafo y Fasnia

     Mucho se ha escrito sobre el célebre aluvión, huracán, tormenta o temporal de 1826, la catástrofe natural de ese tipo más grave de las registradas en la historia de Tenerife, pero aún quedan muchos datos por conocer del mismo. Los días 7 y 8 de noviembre de dicho año, hace casi dos siglos (exactamente 193 años), acometió a las islas, y con especial crudeza a Tenerife, uno de esos temporales de viento y lluvias torrenciales que en periodos más o menos largos suelen visitarla y que, por desgracia, siempre dejan una honda huella de su marcha destructora. Pero si de todos los ocurridos habían quedado recuerdos imperecederos, del que nos ocupa ha perdurado su memoria aterradora, viva y fresca, hasta la actualidad, pues tal fue la magnitud de sus estragos, humanos y materiales, que se considera el mayor de los ocurridos después de la Conquista. De lo ocurrido en Candelaria ya nos ocupamos en otro artículo de este mismo blog, por lo que en esta ocasión nos vamos a centrar en lo ocurrido con motivo de esa catástrofe en Güímar, Arafo y Fasnia.

     En el término de Güímar el número de víctimas mortales se elevó a siete, cinco de ellas sorprendidas en las Dehesas de Agache (de las que tres fueron llevadas por las aguas torrenciales que discurrieron por el barranco de Herques) y las dos restantes arrastradas con sus casas en el barrio de La Hoya de Güímar. En cuanto al resto de los daños, debemos destacar los 103 animales que sucumbieron con motivo del aluvión en todo el municipio: 3 bueyes, 1 yegua, 2 mulos, 5 burros, 72 cabras, 18 ovejas y 2 gallinas. Se dañaron decenas de casas, 7 de las cuales fueron “llevadas desde sus cimientos”. Numerosas fueron las pérdidas de frutos (tanto los que ya se habían recogido como los de próxima cosecha), los estragos de tierras superficiales y las cercas destruidas en los terrenos que se salvaron. Hubo graves daños en las higueras, pues fueron muchas las arrancadas por el huracán sin pérdida de tierras, por un importe de 17.558,3 pesos. También se perdieron otros árboles en La Ladera, la Costa, Las Rozas, Boruga, el pueblo, las Lomas y Agache, por un valor total de 151.249,3 pesos; las tierras que se llevó el agua, en extensión y profundidad, se elevaron a 7.536 almudes y la mayor parte correspondían a viñedos. De los 695 contribuyentes que existían en el término según el último repartimiento de la Contribución Territorial, 498 presentaron cuentas de pérdidas, restando “197 propietarios que puedan asegurar haber sufrido más o menos”. El total de las pérdidas económicas sufridas en el término se evaluó en 196.476,33 pesos.

     En Arafo, además de la pérdida de un elevado número de animales domésticos, árboles silvestres y frutales, así como daños en las cosechas y en las casas de sus habitantes, sólo hubo una víctima mortal del aluvión, que fue arrastrada hasta la costa por las aguas torrenciales que bajaron por el barranco de Añavingo. Por fortuna, el aluvión sólo provocó la muerte de un hijo del municipio de Fasnia, ahogado en un naufragio, pero también afectó a la iglesia de San Joaquín, que por entonces ya adolecía de graves defectos estructurales, pues se desplomaron unas paredes, con el consiguiente deterioro del pavimento, aparte de los consiguientes daños en ganado, viviendas particulares y cultivos…

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Güímar-Fasnia: Don Manuel Díaz y Díaz (1869-1932), agricultor, comerciante, opositor a los fielatos, promotor de un intento de segregación de El Escobonal, presidente fundador de la galería Chifira, vocal fundador del Comité Republicano y alcalde de Fasnia

     Vamos a recordar hoy la vida de un hombre de origen sencillo que fue abriéndose camino en la agricultura, en el comercio y en la política, hasta ocupar en ellos un puesto destacado. De ideología republicana liberal, don Manuel Díaz y Díaz se enfrentó al Ayuntamiento de Güímar por haber establecido un fielato en El Escobonal y promovió un intento de segregación de este pago para su unión posterior a Fasnia. Al igual que hicieron anteriormente otros muchos escobonaleros desarrolló la mayor parte de su actividad en dicho municipio de Fasnia, donde fundó un comercio y la primera galería de agua, la Comunidad de Aguas “La Prosperidad” de Chifira, de la que fue su primer presidente y luego vicepresidente; además, en dicho pueblo cultivó tomates tempranos, diseñó un original modelo de depósito de agua para el riego, fue vocal fundador del Comité local del Partido Republicano y llegó a ocupar la alcaldía constitucional.

     Don Manuel Díaz nació en el entonces pago de El Escobonal (Güímar) el 28 de junio de 1869, siendo hijo de don Francisco Díaz Castro y doña Juana Díaz Yanes, naturales del mismo lugar y vecinos de la Vera de Abajo. El 3 de julio inmediato fue bautizado en la iglesia de San Pedro Apóstol de Güímar por el cura párroco don Juan Elías Hernández, actuando como madrina doña Isabel Delgado López…

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El municipio de Fasnia en el segundo cuarto del siglo XIX

     Aunque no era frecuente que los viajeros pasasen en sus visitas a Tenerife más al Sur de Güímar, sobre todo debido a las dificultades de las comunicaciones, hemos localizado nueve descripciones o referencias a Fasnia en el segundo cuarto del siglo XIX, extraídas de otras tantas publicaciones, posteriores a la segregación de este término del de Arico, en 1795.

     De ellas, la descripción que aporta más información es la de Pascual Madoz, aunque tanto la de Francis Coleman Mac-Gregor como la de José Valentín de Zufiría y José Joaquín Monteverde también incluyen datos de interés. Por su parte, las referencias de Browne y Berthelot se centran en aspectos etnográficos, sobre los enterramientos guanches del Barranco de Herques y la pervivencia de las tradiciones de los antiguos pobladores en esta comarca. Las restantes prácticamente se limitan a datos demográficos. Algunos de los autores también aportan mapas de Tenerife, en los que figura el pueblo de “Fasnea”.

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Güímar-Fasnia: Don Luis López Díaz (1790-1868), propietario agrícola, mayordomo de fábrica de la parroquia San Joaquín, escribiente y testigo en la otorgación de testamentos, alcalde real y constitucional de Fasnia en varias etapas y secretario del Ayuntamiento

     Nuestro biografiado nació en Güímar y se estableció después de su boda en Fasnia, donde destacó como propietario agrícola y desempeñó diversos cargos de responsabilidad: mayordomo de fábrica de la parroquia de San Joaquín, escribiente y testigo en numerosos testamentos otorgados en dicho pueblo, alcalde real y constitucional de este municipio en varias etapas y secretario del Ayuntamiento durante un corto período. Su esposa pertenecía a una de las familias más destacadas y acomodadas de Fasnia, lo que favoreció que su situación económica fuese desahogada y llegase a tener criados a su servicio.

     Nació en Güímar el 25 de agosto de 1790, siendo hijo de don José López Izquierdo y González y doña Josefa Díaz de Campos. Cuatro días después fue bautizado en la iglesia de San Pedro Apóstol por el presbítero don Agustín Antonio Núñez, con licencia de don Pedro José Acosta y Abad, subdelegado y juez apostólico del Tribunal de la Santa Cruzada y beneficiado servidor de dicha parroquial y de la de Santa Ana de Candelaria; se le puso por nombre “Luis del Sacramento” y actuó como padrino don Juan Manuel de Campos, vecino de dicho lugar…

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Güímar-Fasnia: Don Juan Domingo Yanes (1778-1850), agricultor, sargento 2º de Milicias, escribiente y fiel de fechos accidental del Ayuntamiento de Fasnia

     Nuestro biografiado siguió una modesta carrera en las Milicias Canarias, siempre en el Regimiento Provincial de Güímar, en la que comenzó como soldado, para ir ascendiendo a cabo 2º, cabo 1º y sargento 2º; con el penúltimo empleo estuvo movilizado en los Destacamentos de Santa Cruz de Tenerife. Contrajo matrimonio en Fasnia, donde se estableció y vivió más de la mitad de su vida. En esta localidad actuó como escribiente y testigo en la otorgación de testamentos, incluso ejerció como fiel de fechos accidental del Ayuntamiento, aunque en un corto período. Desde el punto de vista profesional, trabajó siempre como agricultor, en las propiedades que poseía en El Escobonal y Fasnia, lo que le permitió sostener a su familia.

     Nació en el pago de Agache (El Escobonal) el 24 de mayo de 1778, siendo hijo de don José Yanes Bello y doña María Miguel (Rodríguez) Márquez, naturales y vecinos del mismo pago. El 31 de ese mismo mes recibió el bautismo en la iglesia de San Pedro Apóstol de Güímar de manos del presbítero don Agustín Antonio Núñez, con licencia de don Luis Ambrosio Fernández del Castillo, beneficiado propio de Güímar y Candelaria; se le puso por nombre “Juan Domingo” y actuó como padrino su tío político don Bernardo Pérez Elías, de la misma vecindad…

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Arico-Fasnia: Don Francisco González Mexías (1674-1751), clérigo minorista, capitán de Artillería y propietario agrícola

     Miembro en una ilustre familia ariquera de militares, clérigos y propietarios agrícolas, nuestro biografiado inició la carrera eclesiástica, en la que tras obtener una capellanía obtuvo la Tonsura y las Órdenes Menores; pero no pasó de clérigo minorista, pues abandonó dicha carrera para contraer matrimonio. Después de casado se estableció en el entonces pago de Fasnia, en el bello caserío del Camino Real, donde vivió el resto de su vida. Dedicado luego a la Milicia, alcanzó el empleo de capitán de Artillería y fue, además, un destacado propietario agrícola.

     Nació en Arico el 20 de septiembre de 1674, siendo hijo de don Salvador González Mexía y doña María García del Castillo. Tres días después fue bautizado “con óleo y chrisma” en la iglesia de San Juan Bautista, por el cura párroco propio don Bartolomé Hernández Vilar; se le puso por nombre “Francisco” y actuaron como padrinos el capitán don Pedro García del Castillo y doña Felipa de Morales, sus tíos maternos. A lo largo de su vida usó indistintamente el apellido “Mexías” o “Mexía”, al igual que los demás miembros de su familia…

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Fasnia: Sor Andrea Esquivel Chico (1920-2018), religiosa oblata del Santísimo Redentor

     Miembro de una familia numerosa y muy conocida en Fasnia, nuestra biografiada sintió desde su adolescencia una férrea vocación religiosa, pero no contó con el apoyo de sus padres. Por ello, cuando ya contaba 29 años abandonó su casa e ingresó como novicia en la Congregación de Religiosas Oblatas del Santísimo Redentor, en la Residencia de Gracia (La Laguna), de la que pasó a la sede de Pamplona, donde emitió los votos temporales, regresando a Tenerife para hacer su profesión perpetua. A partir de entonces prestó sus servicios en La Laguna, Alacuás (Valencia), Zaragoza, donde ejerció como superiora, Benicasim (Castellón), Las Palmas de Gran Canaria y, finalmente, de nuevo en Benicasim, donde falleció a los 98 años de edad, 69 de ellos como religiosa oblata. Siempre destacó por su humildad, su bondad y su espíritu de servicio a los demás.

     Nació en Fasnia el 8 de abril de 1920, a las ocho de la mañana, siendo hija de don Genaro Esquivel Díaz y doña Leoncia Chico Cruz. El 13 de diciembre de 1924 fue bautizada en la iglesia parroquial de San Joaquín por el cura párroco propio don Luis Navarro Nóbrega; se le puso por nombre “Andrea Eloína” y actuaron como padrinos el párroco actuante y la señorita doña Eloína Esquivel Díaz, su tía paterna…

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Fasnia: Don Francisco Rodríguez Perlaza y González (1851-1936), teniente de Milicias, capitán del Ejército Territorial de Canarias, comandante de armas y juez municipal de Fasnia, comandante militar de Guía, Antigua e Icod de los Vinos

     Miembro de una destacada familia de Granadilla de Abona, nuestro biografiado siguió la carrera militar, en la que llevado por su vocación y méritos ascendió a teniente de Milicias y luego alcanzó el empleo de capitán del Ejército Territorial de Canarias. Contrajo matrimonio en Fasnia, donde vivió durante muchos años y ejerció los cargos de comandante de armas y juez municipal. También fue comandante militar de Guía en Gran Canaria, Antigua en Fuerteventura e Icod de los Vinos en Tenerife. Además, tras su retiro hizo varios viajes a Cuba, la Península y algunos países de Europa; destacó como rico propietario, agrícola y urbano, sufriendo un robo importante en su casa de La Laguna; tuvo una intensa vida social en dicha ciudad y fue socio de la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Tenerife.

     Nació en Buenavista del Norte el 4 de octubre de 1851, siendo el único hijo varón de don Francisco Rodríguez Perlaza, natural de Granadilla de Abona, y doña Isabel González Martín, que lo era de la localidad norteña. El día 15 de ese mismo mes fue bautizado en la iglesia parroquial matriz de Ntra. Sra. de los Remedios por el párroco Dr. don José Martín Méndez; se le puso por nombre “Francisco Cándido Antonio José María de los Remedios” y actuó como padrino su tío-abuelo don Francisco González Fajardo, del mismo vecindario…

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Artículo-FRANCISCO RODRÍGUEZ PERLAZA GONZÁLEZ

La primera Academia y Banda de Música de Fasnia (1946-1954), el Patronato para la Protección y Fomento de las Bellas Artes “Amigos del Arte de Fasnia” y la Orquesta “Ritmos Nuevos”

     En 1934 ya existía en Fasnia una orquesta, exclusivamente de cuerda, que amenizaba los bailes, las procesiones y los actos culturales que se llevaban a cabo en los casinos. Desaparecida aquella, a finales de los años cuarenta se pensó en la posibilidad de fundar una banda de música en dicho pueblo, que pudiese amenizar todas las festividades locales.

     Con ese objetivo, en 1946 el Ayuntamiento contrató al primer profesor de la Academia de Música, don José Antonio Aguilar Delgado, garachiquense avecindado en Güímar, quien solo continuó hasta el año siguiente. Por entonces, en 1947 se intentó legalizar el Patronato “Centro Artístico de Fasnia”, para que albergase la futura Banda de Música, pero no llegó a constituirse oficialmente. En 1949, la corporación municipal contrató como director de la Academia y de la Banda de Música en organización a don Antonio García Velázquez, también vecino de Güímar, quien estuvo en el cargo algo menos de tres años, en los que la Banda ya logró actuar en público, así como una orquesta formada en su seno. Le sucedió don Manuel González y González, quien fue contratado por el Ayuntamiento como director interino de la Banda de Música en organización, pero solo estuvo seis meses, de 1952 a 1953, y luego, tras la constitución del Patronato para la Protección y Fomento de las Bellas Artes “Amigos del Arte de Fasnia”, en 1954 fue contratado por éste, aunque solo tenemos constancia de que continuase hasta el año siguiente, si bien continuó algún tiempo al frente de la orquesta “Ritmos Nuevos”, que le motivaba mucho más que la Banda…

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Artículo-BANDA DE MÚSICA DE FASNIA-PRIMERA

Fasnia: Don Horacio Frías Marrero (1929-2011), capitán especialista efectivo y comandante retirado del Ejército de Tierra (Rama Mecánica), luchador, futbolista y colaborador del Proyecto Hombre

     Desde el punto de vista profesional, tras obtener el título de Ajustador-Montador en la Escuela de Formación Profesional del Ejército, don Horacio siguió una brillante carrera militar, que comenzó como ayudante especialista mecánico electricista y en la que fue ascendiendo sucesivamente a cabo, cabo 1º, sargento, brigada y subteniente especialista. Luego ascendió a teniente y capitán del Cuerpo Auxiliar de Especialistas, concediéndosele el empleo honorífico de comandante del Ejército de Tierra (Rama Mecánica) después de su retiro, por lo que llegó a ser el militar de mayor graduación nacido en Fasnia. Fue condecorado con la Cruz a la Constancia en el Servicio, además de la Cruz y la Placa de San Hermenegildo. También obtuvo el título de Oficial Industrial de Electricidad (Instalador-Montador). Como la mayoría de sus paisanos, en su adolescencia y juventud se volcó en la lucha canaria, llegando a estar federado en el “C.L. Brisas del Teide” de Fasnia y en el “C.L. Tinguaro B” de Santa Cruz de Tenerife”; luego se interesó por el fútbol y, una vez establecido en Santa Cruz de Tenerife, jugó en el “Estrella Polar” del barrio de la Plaza Militar, en el “Golondrina” del barrio Uruguay, en el “Uruguay” del mismo barrio, en el “U.D. Santa Cruz” (filial del “C.D. Tenerife”) y, finalmente, en el “C.D. Tenerife”, en el que estaba fichado cuando ascendió a 2ª división. Además, al final de su vida tuvo un fuerte compromiso con la Iglesia Católica, pues fue colaborador del “Proyecto Hombre” e impartió cursillos prematrimoniales en distintas parroquias.

     Nació en Fasnia el 22 de enero de 1929, siendo hijo de don Eladio Frías Díaz, natural de El Escobonal (Güímar), y doña Justa Marrero Díaz, que lo era de la primera localidad, donde estaban domiciliados en la Carretera General del Sur. El 12 de febrero inmediato fue bautizado en la iglesia de San Joaquín por el cura párroco don Luis Navarro Nóbrega; se le puso por nombre “Horacio Vicente” y actuaron como padrinos don Aurelio y doña Fidelina González…

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Artículo-HORACIO FRÍAS MARRERO