Tras adquirir una notable cultura, nuestro biografiado emigró a Cuba, donde colaboró en la prensa. De regreso a la isla se estableció en su pueblo natal, donde se dedicó al periodismo, como colaborador de La Voz de Icod, La Opinión, El Progreso, El Tiempo, La Prensa y La Comarca, siendo corresponsal del penúltimo. También se volcó en la política, siempre en el campo republicano, siendo secretario durante mucho tiempo del Comité local e interventor electoral. Asimismo, a lo largo de su vida desempeñó otros cargos: secretario de la Sociedad “Unión Patriótica”, vocal de la Junta local de Primera Enseñanza, directivo de la Sociedad “Centro Isorano”, juez municipal suplente de Guía de Isora (en el que sufrió un atentado), bibliotecario de la Sociedad “Amigos del Arte”, secretario de la Comunidad de aguas “El Drago” y vocal del Casino de Guía. Además, destacó como docente y orador, siendo uno de los vecinos que adelantó las maderas para la reconstrucción de la iglesia y la edificación de la casa consistorial de dicha localidad.
Nació en Guía de Isora el 1 de mayo de 1872, a las seis de la madrugada, siendo hijo de don Antonio Álvarez Arbelo, natural de Icod, y doña Francisca Hernández González, que lo era de la localidad sureña. El 8 de ese mismo mes fue bautizado en la iglesia de Ntra. Sra. de la Luz por el cura párroco don Epifanio Díaz Saavedra; se le puso por nombre “Manuel Sebastián” y actuó como padrino don Francisco Mendoza Hernández…
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