La incorporación de la imagen de Santa Rita a la iglesia de Tamaimo (Santiago del Teide), la creación de su cofradía y las primeras fiestas en su honor

En este artículo vamos a recordar la entronización de la imagen de Santa Rita de Casia en la ermita de Santa Ana de Tamaimo, cuando aún no había sido elevada a parroquia. Fue donada por una hija de dicho pueblo, doña Aurora Ferrer Guanche, quien vivía en Santa Cruz de Tenerife y también donó un Crucifijo para la sede en dicho pueblo del partido conservador Acción Popular Agraria. La bendición de ambas imágenes se llevó a cabo el 13 de enero de 1935, con la localidad engalanada al efecto; actuaron como padrinos la donante y su hermano don Alfonso, así como doña Ana Ferrer Soto, doña Eduvigis Martín y don Manuel Hidalgo; la efectuó el obispo de la Diócesis, Fray Albino González Menéndez-Reigada, quien también administró el sacramento de la Confirmación a numerosos niños; tras la bendición, se impusieron las medallas a las mujeres afiliadas a la nueva Asociación o Cofradía de Santa Rita, que sería presidida por doña Delfina Ferrer; y doña Aurora ofreció una merienda en la sede del citado partido a los niños participantes, a los que se repartieron estampas y libros.

La primera fiesta en honor de Santa Rita se celebró en Tamaimo en los días 26 y 27 de julio de ese mismo año 1935, aunque unida a la de la patrona Santa Ana, y en ella se celebró la Primera Comunión de los niños de la localidad. En el año siguiente, con motivo del inicio de la Guerra Civil, no tenemos constancia de su celebración, pero sí en 1937 y 1938, en plena contienda bélica, por lo que se aprovechó en ellas para pedir por su finalización. La de ese último año volvió a ser presidida por el obispo Fray Albino, quien impartió de nuevo la Confirmación y bendijo el nuevo cementerio de la localidad. En 1939, Tamaimo celebró las fiestas en honor de Santa Rita de Casia con una mayor alegría y en acción de gracias por la terminación de la contienda bélica; siguió siendo organizada por la donante de la imagen, doña Aurora Ferrer, quien además donó prendas de ropa para los niños más pobres del pueblo. De momento, no sabemos cuando dejó de celebrarse dicha festividad…

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